Todos somos una persona tóxica para alguien

Últimamente hemos escuchado (o más bien leído) mucho sobre las personas tóxicas; lo malas que son en nuestra vida y lo bueno que es el que se vayan de ella.
Por ahí se dice:

«Cuando una persona tóxica se aleja es como si la basura se sacara sola…»

Y a pesar de que no es difícil distinguirlas entre nuestro grupo social, hay algo que no has notado o al menos no te han dicho:

TODOS SOMOS UNA PERSONA TÓXICA PARA ALGUIEN.

Y no, no lo digo para que te ofendas o te sientas mal al respecto, sólo para -tal vez- hacer un poco de consciencia y bajarle 2 rayitas a este mame.

Supongamos que tengo una amiga a la que llamaré… mmmm… Estela, sólo por decir un nombre.
(Cualquier parecido con la realidad, es mera coincidencia)

Estela es una morra estudiada, chambeadora que disfruta de salir todos los fines de semana a reventar y gastar el dinero que ha ganado trabajando.
Algunos la verán como algo normal, otros como un role model y quizá algunos pocos como una persona tóxica.

Estela es una despilfarradora.
Estela es una borracha.
Estela es una puta…

En este caso ¿quién es la “persona tóxica”?
Estela por hacer lo que siente normal en su estilo de vida o la gente que la crítica desde lejos.
La respuesta: ¿A quién carajos le importa?

El dilema no son las personas tóxicas, las envidias, malas vibras o chismes.
El problema es que permitimos que las personas opinen de nuestra vida. Nos exponemos diariamente a la crítica y nos martirizamos con sus comentarios.

Esto es fácil:
Aleja a las personas que no te construyen de tus círculos sociales tanto físicos como digitales.
No tienes que aceptar a media oficina en tus redes sociales y no te sientas mal por borrar, bloquear o dejar en visto a alguien.
No tienes que publicar todo lo que pasa en tu vida con lujo de detalles, piensa 2 veces antes de hacerlo.

Las “personas tóxicas” dejarán de ser una constante o tendencia en nuestras vidas cuando dejemos de hacer tan público todo nuestro ser.
De todas formas, alguien va a hablar mal de ti, lo importante es no darles más herramientas para que en verdad te lastime, te agreda o te importe.
No te preocupes, no será nada diferente a lo que pasaste en la secundaria, prepa o Universidad y mira ¡sobreviviste!

Así que tómate unos minutos para sacar toda la «basura» de tus redes sociales y evita que entre nueva para ensuciarte y apestarte la vida.
Y en este caso el «reciclado» no aplica, la gente no cambia, sólo disfraza mejor su olor.