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MALÉFICA DUEÑA DEL MAL: GUERRA DE DOS REINOS – A P O L O R A M A
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MALÉFICA DUEÑA DEL MAL: GUERRA DE DOS REINOS

MALÉFICA DUEÑA DEL MAL: GUERRA DE DOS REINOS

No es el año de los live-action más felices para Disney. Luego de lo difícil que fue la aceptación de la crítica para «The Lion King», volvemos con una segunda parte a aquella taquillera historia de «Maleficient», quien allá por 2014 recaudara más de 750 millones de dólares en todo el mundo.

Robert Stromberg, el director de la primera parte, no es de la partida en esta oportunidad y para esta entrega, el estudio eligió al prestigioso Joachim Rønning (KonTiki) para su reemplazo.

¿Razones? Creemos que el trabajo en esta producción implicaba mostrar más de un universo íntegramente conectado con la naturaleza y el conflicto de poder que se da entre sus criaturas, impulsado por el ansia de poder de una mujer que realmente, es el rostro del mal.

 

 

Al filme se la percibe muy violenta y oscura (porque la temática impulsa esto, sino piensen en que la peli fue calificada sólo apta para mayores de 13 años) o pasa por estadíos simpáticos y melosos, coqueteando con el espíritu de los viejos clásicos del estudio. Hay ahí un tema que no termino de entender.

 

Es como si la propuesta impulsaba a entregarse a desentrañar este conflicto, pero por otro lado, ofreciendo mucho espacio para consolidar a su nueva princesa. Tanto es así que si se fijan, verán que no hay demasiado tiempo compartido entre Jolie y Fanning esta vez. Me da la impresión de que el film intenta explorar otra mirada del cuento clásico e incorporar problemáticas adultas, contemporáneas.

Pero en ese camino, en esa construcción, aparece toda la estructura natural de este tipo de films, que tiene que ver con el candor, la música, las hadas, la heroína, la magia… que tiene que estar, casi por defecto. Ahí es donde la película se pierde un poco, y desconcierta al espectador no casual.

 

Denisse De la Parra